Los registros de la gastronomía son absolutamente fascinantes. Uno de ellos son los retos de comida. Para ello, no hay límites hablamos de retos extremos en los que tanto restauradores como comensales han apostado fuerte por el placer de cocinar y de comer. Los negocios de restauración que afrontan estos retos son unos valientes y confían en su clientela más fiel porque saben que no les defraudarán degustando platos o comidas imposibles.
Retos de comida impensables
1. ¿Qué harías con cinco quilos de albóndigas? En el restaurante Bartolini’s de Illinois no tuvieron reparos en retar a sus clientes a comerse un bocadillo con cinco quilos de albóndigas. Seguramente, estáis pensando quién fue la persona que se atrevió con el reto. Se trata de una comedora profesional. Molly Schuyler tardó menos de siete minutos en comerse los cinco quilos de albóndigas. Todo un récord. El restaurante se vino arriba y propuso un premiso de 2.500 dólares a los tres clientes que fueran capaces batir el récord de Molly. ¿Os atrevéis?
2. Otro restaurante de Estados Unidos sugirió un reto delicioso y ambicioso. Cocinó una pizza de 200 raciocines. ¿Quién se resiste a una buena pizza? Nadie o casi nadie, pero 200 raciones son palabras mayores. Pero el restaurante de California Big Mama’s & Papa’s no se lo pensó dos veces. Está dispuesto a pagar 1.000 dólares a las 6 personas que sean capaces de acabar con las 200 raciones de pizza. Los ganadores no pagarán ni un céntimo, pero los perdedores tendrán que abonar 300 dólares que es el precio estimado para la pizza gigantesca.
3. El restaurante de Las Vegas, Heart Attack Grill se ha sumado a los retos de comida extremos. Sin embargo, su reto plantea ingerir una hamburguesa de unas 10.000 calorías. Son tremendamente osados. El restaurante además de servir esta insana comida es una auténtica sátira. Está ambientado como el interior de un centro sanitario. Las camareras van vestidas de enfermeras y tratan a los clientes como pacientes. Y para sorpresa de los clientes las hamburguesas reciben el nombre del tratamiento médico que pueden llegar a necesitar los clientes si abusan de esta comida.
Placeres gigantes
4. ¿Has pensado alguna vez en comer un burrito gigante? Si lo deseas tendrás que ir a un restaurante de Albuquerque. K&I Diner ofrece a sus clientes tres burritos de tortilla de harina con frijoles, carne de res y una sabrosa salsa de chile rojo sofrita con queso y un enorme montón de papas fritas. El burrito pesa 4 quilos y te dan una hora para comértelo. De no hacerlo, tendrás que pagar 24 dólares.
5. Y, por último, el restaurante The Big Texan de Texas ofrece un filete de ternera de 2 quilos. Su precio es de 72 dólares que no abonarás si consigues comértelo sin dejar nada en el plato. Este reto hasta la fecha ha sido superado por más de 10.000 personas desde 1962,.
¿Os atrevéis a retar a vuestros clientes? Esta estrategia gastronómica y de marketing os haría famosos para siempre. Mientras os decidís por el plato o la comida que va a sorprender al mundo, os invitamos a conocer nuestra línea dulce y salada de productos. Estaremos encantados de serviros nuestros productos. No dudéis en contactar con nosotros. ¡Os esperamos!
