¿Quieres sorprender a los clientes de tu restaurante? Te contamos cómo hacerlo en dos palabras: cheesecake receta. No hay paladar que se resista a las bondades de la tarta de queso. Es cremosa y suave. Por ello, te presentamos cinco recetas de cheesecake con las que triunfarás porque este postre es apreciado por comensales de todas las edades; especialmente, por los niños, dada su textura tan particular Y, además, la preparación es sencilla, Incluso, hay recetas en las que no es necesario ni hornear y el resultado es espectacular. No te arrepentirás de incluirla en tu carta de postres
Elige qué cheesecake receta te gusta más
Uno: Sin horno. Necesitarás mantequilla, galletas María, leche condensada, limón rallado, gelatina, queso crema, fresas y frambuesas. Usa las galletas y la mantequilla para la base. El relleno lo haces con el queso crema, la leche condensada, la gelatina y el limón rallado. Lo pones en el congelador durante dos horas y, finalmente, decoras la tarta con fresas y frambuesas.
Dos: New York Cheesecake. El secreto de esta tarta está en el relleno. Lleva queso crema, azúcar, crème fraîche, vainilla, limón, huevos y harina. No obstante, lo que le dará un toque especial a tu tarta es la salsa de frambuesa. La tienes que hacer con gelatina, azúcar, zumo de limón y, naturalmente, frambuesas. El resultado no te defraudará porque evoca el sabor genuino de la ciudad que nunca duerme. Esta es una tarta muy especial que gustará a todo el mundo.
Tres: De horchata. Este postre original lo puedes hacer con los mismos ingredientes que otras cheesecake pero mezclando la crema y la leche condensada con la horchata para conseguir ese sabor tan particular. Te recomendamos que uses galletas con canela para elaborar la base y que, cuando la termines, les des un toque final en la decoración espolvoreando canela. Esta tarta está especialmente recomendada para el verano.
Manzana, galletas y nueces
Cuatro: De manzana. La base de esta tarta se hace con galletas, nueces y mantequilla. Para fusionar la manzana en el relleno de la tarta, tienes que calentar mantequilla. Cuando esté caliente, añade manzanas, zumo de limón, canela, nuez moscada y un chorrito de zumo de manzana. No deja de ser una tarta de queso, pero con el sabor inconfundible de la manzana. Los amantes de esta fruta, sin duda, la disfrutarán.
Cinco: De té matcha. Para el final hemos dejado una auténtica delicatessen. La base de esta tarta se hace con galletas de avena. Tienes que hacer una infusión de té matcha y dejarlo enfriar. Mezcla el queso crema con la crema y cuando la fusión sea uniforme has de agregar el té. Y, por último, añades gelatina y chocolate blanco. Lo decoras con té, fresas y chocolate. Y, es obligado servir este delicioso y delicado postre con una taza de té.
Te deseamos mucho éxito con la cheesecake receta que decidas incluir en la carta de postres de tu restaurante. No obstante, te proponemos visitar nuestro blog para que descubras otras delicias gastronómicas.